Programa capacitas: inclusión e ilusión Universidad Católica San Antonio de Murcia
María del Mar Pintado Giménez. mpintado@ucam.edu. Vicedecana de los Grados de Educación Infantil y Primaria. Directora del Programa CAPACITAS.
Cecilia Mateo Sánchez. cmateo@ucam.edu. Profesora del Programa CAPACITAS.
Isabel Mengual Luna. imengual@ucam.edu. Profesora del Programa CAPACITAS.
I. ORIGEN E INICIOS DEL PROGRAMA CAPACITAS
El programa surge a propuesta de la Fundación GMP, entidad que plantea la iniciativa al Presidente de la Universidad Católica San Antonio de Murcia (UCAM), D. José Luis Mendoza Pérez, dado el carácter social y humano que presenta, se instaura en el curso académico 2012-2013.
La innovación de este proyecto radica en la inclusión de jóvenes con discapacidad intelectual en entornos universitarios. Desde su inicio, se fomenta la participación de todos los docentes de las diferentes titulaciones, tanto en el ámbito académico como en el de la difusión y divulgación de la experiencia.
La formación consta de dos cursos académicos que, una vez concluida, dota al estudiante del Título Propio Universitario denominado: Técnico de Empresas y Actividades Sociolaborales.
II .OBJETIVOS Y FASES DE DESARROLLO
- Objetivos
El programa soporta dos objetivos principales centrados en la inserción socio-laboral: la formación y la sensibilización.
En primer lugar, el proyecto promueve la formación de nuestros/as alumnos/as con discapacidad intelectual para un correcto desempeño laboral. En relación con este objetivo, tenemos que indicar que no sólo nos centramos en competencias puramente laborales, sino también potenciamos competencias personales que favorecen un buen desempeño profesional, aspecto que se desarrolla con detalle en el próximo apartado.
En segundo lugar, el programa busca la sensibilización de las empresas, considerando este punto como un aspecto primordial para la futura inserción laboral de las personas con capacidades diversas.
Con estos dos objetivos, por tanto, se persigue una inserción sociolaboral total de las personas con discapacidad intelectual. En este sentido, se engloba tanto un trabajo académico en la universidad, como un trabajo externo, centrado en el conocimiento del programa, sin olvidar las ventajas que tienen para las empresas la participación activa en este tipo de proyectos.
- Fases de desarrollo
El programa consta de dos cursos académicos. Un primer año dedicado a una formación puramente académica, durante el cual se trabaja una formación básica, profesional y personal, a la vez que se van configurando los perfiles profesionales de cada uno de los/as alumnos/as, en función de sus propios intereses y capacidades reales.
Durante el segundo curso académico se siguen potenciando las competencias que desarrollarán y precisarán en el mundo laboral, aunque el eje central de este curso serán las prácticas tanto internas como externas, a través de las cuales los/as alumnos/as puedan poner en funcionamiento los conocimientos adquiridos durante el tiempo de formación. Estas prácticas están sujetas a la metodología del Empleo con Apoyo (en adelante EA).
Esta división del programa en un año teórico y un año práctico aporta al alumno/a la confianza suficiente para afrontar las prácticas externas de una manera óptima, disponiendo de las competencias suficientes para llevar a cabo este punto crucial en su formación.
Estructura del programa formativo
Las asignaturas que cursan los alumnos de este programa durante los dos cursos se pueden agrupar en tres bloques interrelacionados (cuadro 1):
- Competencias básicas: centradas en la lectoescritura, aspectos matemáticos, acercamiento a la tecnología.
- Competencias específicas para el desempeño laboral: relacionadas con la búsqueda del perfil laboral, desarrollo de competencias en diferentes ámbitos laborales, desempeño real de tareas en prácticas en empresas.
- Competencias personales: relacionadas con el control de las emociones, fomento de relaciones interpersonales adecuadas, control y manejo del tiempo y autonomía en la vida personal y profesional.
Cuadro 1. Asignaturas del programa CAPACITAS
Todo este conjunto de asignaturas, que se encuentra detallado en el cuadro 1, establece como prioridad un desarrollo integral del alumno/a, no persiguiendo solo que consiga competencias profesionales para un correcto desempeño en el ámbito laboral, sino que busca la adquisición de conocimientos y habilidades que le permitan desenvolverse en su vida diaria de una manera autónoma. Esta formación persigue una educación donde el fin último es que el alumno/a logre la integración exitosa en todos los ámbitos de la sociedad.
III. ALUMNOS PARTICIPANTES EN EL PROGRAMA
En CAPACITAS llevamos a cabo una metodología basada en la enseñanza individualizada, centrada en las particularidades y necesidades del alumnado. Es por esto que los grupos que componen cada curso son reducidos, no superando los 12 alumnos/as. De hecho, si es necesario, el grupo se subdivide, contando con dos profesores vinculados a cada una de las materias, circunstancia que permite respetar los distintos ritmos de aprendizaje, y llevar un seguimiento personalizado y adaptado a cada caso.
Esta manera de trabajar ayuda al alumno/a a hacer visibles sus capacidades, dotando al profesorado de información suficiente para poder configurar su perfil laboral de una manera fiable. Además, el alumno/a encuentra que el nivel exigido no excede sus propios límites, y esto le permite llevar un mejor rendimiento.
A pesar de la heterogeneidad que, de manera natural, presentan estos grupos de alumnos/as, planteamos una serie de requisitos previos que favorezcan un buen rendimiento en el programa, entre los que se encuentran:
- Ser mayor de edad
- Tener reconocido un 33% de discapacidad, en el que se recoja la discapacidad intelectual
- Haber adquirido unas competencias académicas básicas: saber leer, escribir y realizar operaciones matemáticas mínimas (sumar, restar, multiplicar y dividir)
- Tener motivación para estudiar y trabajar
Además, se valora de manera muy positiva que el solicitante tenga experiencia en el ámbito laboral o cursos destinados al desarrollo de competencias profesionales. Todos estos requisitos hacen que nuestros alumnos/as puedan beneficiarse de nuestra formación de manera óptima, adecuando sus capacidades a las exigencias del programa.
IV. ACTIVIDADES DE INCLUSIÓN EN EL CAMPUS UNIVERSITARIO
Desde el primer año que se puso en funcionamiento el programa CAPACITAS, se han llevado a cabo una serie de actividades que fomentan la inclusión real de nuestros alumnos/as dentro del ámbito universitario. En este sentido, tenemos una serie de actividades que desarrollan en conjunto alumnos/as de CAPACITAS y alumnos/as de otras titulaciones de nuestra universidad.
Por un lado, en ocasiones señaladas, como el Día de la Discapacidad, es común que nuestros alumnos/as, en colaboración con alumnos/as de titulaciones como los Grados de Educación, Psicología y Terapia Ocupacional, preparen talleres destinados a todo el personal universitario, en los cuales se potencia el conocimiento y la sensibilización en el ámbito de la discapacidad.
Además, en cada curso académico se integran diferentes tareas prácticas en la planificación docente de algunas asignaturas relacionadas con las Necesidades Educativas Especiales de los Grados de Educación Infantil y Primaria. Se trata de encuentros constructivos entre alumnos/as de las diferentes titulaciones para conocer más sobre la discapacidad intelectual a través de la experiencia directa de nuestros alumnos/as de CAPACITAS. En estos encuentros, los alumnos/as con discapacidad intelectual narran sus experiencias en las diferentes etapas educativas, fomentando la discusión sobre la realidad educativa, y potenciando aquellos aspectos que favorezcan la atención a la diversidad en entornos educativos.
Todas estas actividades son realizadas con la plena implicación de todos los alumnos/as, siendo un foco de motivación para el aprendizaje y la inclusión, que se ve reflejado en la participación cada vez más activa de alumnos/as de diferentes titulaciones.
V. IMPLICACIÓN DEL PROFESORADO UNIVERSITARIO
El profesorado que imparte docencia en el programa formativo CAPACITAS está altamente cualificado y pertenece en su mayoría al Departamento de Educación de la UCAM. Aunque también existen profesores vinculados al programa de otros departamentos o titulaciones como Psicología, Enfermería, Terapia Ocupacional o Periodismo. El profesorado se adscribe a diferentes ramas de conocimiento, lo que hace que el aporte al programa sea multidisciplinar. Las tareas más destacadas del profesorado se detallan a continuación:
– Selección de los/as candidatos/as
– Admisión en el programa
– Entrevistas a los padres y a los/as alumnos/as
– Tutorizaciones personales
– Seguimientos de las diferentes tareas para el primer y segundo curso
– Coordinación entre la UCAM y Asociaciones
– Coordinación UCAM y los preparadores laborales
– Perfiles profesionales
– Actividades vinculadas con otras titulaciones de la UCAM
– Realización de diferentes jornadas, congresos, etc.
– Campañas de sensibilización
– Coordinación del viaje fin de curso
– Graduación de los egresados
La labor del profesorado vinculado al programa no es solo docente; el objetivo es impulsar, concienciar y dotar a los estudiantes de herramientas para el futuro desempeño profesional, así como potenciar la investigación en el ámbito de la discapacidad intelectual. En este sentido, la UCAM cuenta con una web adaptada a lectura fácil realizada por el profesorado y testeada por los/as estudiantes del programa.
VI. PRÁCTICAS EN EMPRESAS
Las prácticas de los alumnos/as del Programa Capacitas se desarrollan dentro de su segundo curso de formación, y están compuestas por un primer periodo en el que el alumnado, previamente formado en prevención de riesgos laborales y definido su perfil, se enfrenta a un pre-practicum dentro de las instalaciones de propio campus universitario. Las tareas a desarrollar en este momento están coordinadas por el profesor de competencias laborales y seguidas por el equipo de preparadores laborales. Abarcan un amplio abanico de tareas: desde administrativas hasta las más específicas del sector servicios, tanto en cafetería como en las diferentes tiendas y reprografías del campus. Estas pre-prácticas en el propio ámbito de la universidad aportan seguridad al alumno/a, al igual que permiten que se pueda seguir perfeccionando el perfil profesional que se ha realizado en momentos anteriores del programa.
Seguidamente, previo rastreo y prospección laboral, el equipo de EA ubica a cada estudiante en el puesto de trabajo más adecuados a su perfil. El periodo de prácticas consta de tres meses en los cuales el alumno/a inmerso en entornos laborales normalizados es seguido por su Preparador Laboral. Esta figura fundamental en la metodología de EA tiene una finalidad clave que es la inserción e integración laboral en entornos ordinarios. Cabe recordar que el EA surge después de un largo proceso de transformación y sensibilización por parte de los familiares, asociaciones e instituciones y de su lucha por los derechos de las personas con discapacidad, defendiendo el principio de normalización e inclusión social y laboral de las personas con capacidades diversas.
Las funciones específicas del Preparador Laboral son:
- Apoyo individualizado a la persona con capacidades diversas.
- Función técnica consistente en la adaptación del entorno de trabajo: adecuar el espacio de trabajo a las demandas y necesidades de éste.
- Función social de búsqueda de empleo y captación de empresarios dispuestos a emplear a personas con capacidades diversas.
El Preparador Laboral debe poseer una intuición personal para la búsqueda de otro de los agentes protagonistas en este proceso: el apoyo natural. Esta figura será la persona que quedará destinada dentro del ámbito laboral a apoyar, ayudar e integrar al trabajador con capacidades diversas. Al igual que el Preparador Laboral, el apoyo natural ha de reunir unas características comunes a este y será, en gran parte de los casos, algún otro trabajador/a que se haya implicado en el proceso voluntariamente y haya mostrado una actitud tendente a la colaboración desde el principio, por iniciativa propia.
Por último, cuando las necesidades de apoyo son significativas este apoyo natural puede actuar en pro de la persona con discapacidades diversas, lo que se denomina círculo de apoyo. Este círculo está compuesto por personas cercanas a la persona con discapacidad, en la mayoría de los casos voluntarias, que se comprometen a trabajar juntas para que la integración del trabajador sea plena y, a la vez, exitosa.
Finalmente, no podemos olvidarnos de otro de los componentes necesarios en este proceso, el empresario. Una empresa bien informada y trabajada, a priori es un entorno de trabajo seguro. En la normalidad y sin conocer la metodología del EA el empresario podría estar convencido de que emplear a una persona con discapacidad va a suponer un trabajo extra para él o para alguno de sus trabajadores. Esto es precisamente la misión principal del Preparador Laboral; cuando se mueve y rastrea el mundo empresarial, debe saber eliminar esta falsa creencia y explicar el acompañamiento y la utilización de los medios y adaptaciones necesarias para la plena inserción del trabajador con discapacidad subsanando posibles dudas e inquietudes.
Todo el equipo humano que compone el Programa trabaja de manera colaborativa teniendo como eje central el bienestar del alumno/a y su impulso en el mundo laboral. Sin olvidar que la misión fundamental del programa es la autonomía personal, la normalización y la inserción total en la sociedad.
En el cuadro 2 se relacionan las empresas en las que se han realizado prácticas y/o han contratado a trabajadores con DI formados en el programa.
Cuadro 2. Relación de empresas con alumnos/as en prácticas y/o contratados
VII. VALORACIÓN DE LA EXPERIENCIA
Actualmente nos enfrentamos al tercer año del desarrollo del programa. Y con la experiencia que poseemos hasta el momento, podemos afirmar que el impacto del programa ha sido muy positivo para todos los agentes implicados: alumnos/as, familias y profesores.
En primer lugar, para los alumnos/as participantes ha supuesto un crecimiento tanto académico como personal. Tal y como indican familiares y los propios alumnos/as, el programa CAPACITAS ha cubierto un vacío académico que era un gran problema para el desarrollo integral de las personas con discapacidad intelectual. Hasta el momento, las posibilidades de promoción de este colectivo se centraba en itinerarios muy marcados que, a pesar de ser muy positivos y muy bien estructurados, en muchos casos no eran suficientes. De acuerdo con lo que nos transmiten nuestros alumnos/as, las posibilidades de aprendizaje y de normalización que este programa aporta son muy adecuadas a las necesidades que se demandan, encontrando en él un lugar para sentirse parte de una sociedad que, anteriormente, se les antojaba imposible: la comunidad universitaria.
Por otra parte, para las familias, tal y como nos expresan en los diferentes encuentros, está siendo una experiencia que les aporta ilusión y amplía las expectativas de avance formativo y profesional de sus hijos, formando parte activa del equipo, siendo imprescindible su participación y valoración. La participación activa de las familias es vital para fomentar la autonomía de los/as estudiantes. Unidas éstas al tutor personal complementan y personalizan diferentes planes de trabajo en el aula que se hacen extensibles al ámbito familiar y doméstico.
Por último, el impacto en la comunidad universitaria, tanto para alumnos/as y personal de la universidad, ha sido muy enriquecedor. El aprendizaje de valores que lleva asociado este tipo de proyectos es indudable, el respeto a la diversidad que tanto han estudiado nuestros alumnos/as en diferentes asignaturas se ve reflejado en la convivencia que experimentan con sus compañeros/as del programa CAPACITAS, siendo esta experiencia un aprendizaje real en su propio día a día.
No podemos terminar este apartado sin incluir una reflexión sobre el cambio que este proyecto ha inculcado en los propios profesores del programa. Todos los profesores confirman que el programa CAPACITAS aporta una visión diferente a su docencia. La implicación activa y profesional en el proyecto lleva asociado un cambio de perspectiva en la manera de entender la docencia. Por tanto no es sólo la profesionalidad y el tiempo lo que hace que este trabajo funcione, sino los valores y el cambio de actitudes que conllevan.
Pero también han ido surgiendo algunas dificultades, las cuales podemos situarlas en el exterior del programa: en la sensibilización de la sociedad. A pesar de encontrarnos en un momento en el que la inclusión de las personas con discapacidad es uno de los lemas dentro de la legislación y la moralidad de la sociedad, la realidad es que aún queda mucho trabajo por hacer en materia de inclusión. Es cierto que el ámbito empresarial cada día está más sensibilizado; sin embargo, el desconocimiento de las verdaderas capacidades de las personas con discapacidad intelectual está aún latente en nuestra sociedad. Es necesario que existan más campañas y proyectos como el que llevamos a cabo para que la inclusión de un alumno/a con discapacidad intelectual en una empresa no sea una excepción a celebrar, sino que sea una situación que no cause sorpresa, que se vea con absoluta y entera normalidad.